'Iberia' y 'Air Europa', nueva estructura

A ver qué dicen y cómo interpretan los expertos y los conocedores del sector del transporte aéreo las consecuencias de la paralización de la fusión entre las compañías ‘Iberia’ y ‘Air Europa’, convenida hace un par de años. Y sobre todo, si va a afectar a los canarios para sus viajes a la península.

'Iberia' y 'Air Europa', nueva estructura
La ruptura entre Iberia y Air Europa no es total. Según ha destacado el presidente de IAG, Luis Gallego, se busca una “nueva estructura” que permita otro tipo de operación que no sea la adquisición total o la fusión de Iberia-Air Europa

Por Salvador García Llanos

Para situar al lector: el ‘holding’ o tenencia (traducido), un grupo empresarial que, en este caso, IAG, integra a ‘Iberia’, ‘Vueling’, ‘Air Lingus’, ‘British Airways’ y ‘Level’, tenía como objetivo absorber ‘Air Europa’, de la familia Hidalgo, considerada la segunda aerolínea española, y así crear un gigante nacional, sólido y competitivo. La crisis del sector como consecuencia de la pandemia y la delicada situación financiera que atenaza a ‘Air Europa’ han hecho que la operación fracase, tal como ya se conoce en el ámbito de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Como se sabe, ‘Iberia’ y la familia Hidalgo -principales accionistas de Globalia, matriz de ‘Air Europa’- pactaron la venta, por mil millones de euros. Con posterioridad, el importe se rebajó a quinientos millones y, dada la situación de ‘Air Europa’, ese precio seguía siendo demasiado alto para IAG. ¿Qué decían en las instituciones de la Unión, mientras tanto? Pues la Comisión Europea (CE) ultimaba su decisión sobre la operación -disponía de plazo límite hasta el 4 de enero-, en la que iba a imponer duras condiciones de cesión de rutas para permitir la venta, lo que la complicaba aún más la integración.

La ruptura entre Iberia y Air Europa no es total. Según ha destacado el presidente de IAG, Luis Gallego, se busca una “nueva estructura” que permita otro tipo de operación que no sea la adquisición total o la fusión de Iberia-Air Europa. Y en ese modelo, en esa nueva estructura, va a acabar desempeñando un papel protagonista el Gobierno para garantizar la continuidad de ‘Air Europa’. El parón de la fusión entre ambas compañías empuja al Gobierno a entrar en el accionariado de esta compañía para garantizar su viabilidad y hacerlo sin tener que inyectar más dinero en la aerolínea. El Estado ya rescató ‘Air Europa’ con dos préstamos por importe de cuatrocientos setenta y cinco millones de euros del fondo para compañías estratégicas de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). Se trata de un préstamo ordinario de doscientos treinta y cinco millones a devolver antes de 2026 y otro préstamo participativo por los doscientos cuarenta millones de euros restantes.

La fusión, por tanto, está paralizada y ello obligará, suponemos, a replantearse muchas cosas. Desde el Ministerio de Asuntos Económicos, comandado por la vicepresidenta Nadia Calviño, se ha confirmado que se están analizando distintas opciones para garantizar la continuidad de ‘Air Europa’ tras la renuncia a la operación de compra por ‘Iberia’. Es más, fuentes del citado Ministerio apuntaron que “queremos enviar un mensaje de tranquilidad a los empleados, los clientes y proveedores de ‘Air Europa’. El Gobierno va a analizar las distintas opciones que se abren en esta situación, con la intención de garantizar la continuidad de la actividad y las operaciones”.

Según ha trascendido, tanto las dos aerolíneas siguen defendiendo el sentido estratégico de una integración de ambas, de uno u otro tipo, pues ello propiciaría fortalecer el aeropuerto de Madrid como un gran ‘hub’ europeo (centro de interconexión de vuelos), para defender el turismo en España y para reforzar el liderazgo de IAG en las rutas entre Europa y Latinoamérica, el negocio más rentable de ambas aerolíneas.

Pues en Canarias quedamos a la espera. Aguardemos que no peligren las condiciones reguladoras de los desplazamientos. Aguardemos.