Polarización mediática e interestatal

La organización no gubernamental internacional Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha hecho pública su vigésima edición de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa la cual conmemoramos esta misma semana, en Canarias de una forma especial al registrar las tres asociaciones de la prensa localizadas en el archipiélago (Tenerife, Gran Canarias y Lanzarote-Fuerteventura, orden según censo de integrantes) un escrito que promueve la creación del Colegio Profesional de Periodistas Canarios.

Polarización mediática e interestatal
En el estudio se evalúa las condiciones en las que se ejerce el periodismo en ciento ochenta países y territorios del mundo

Por Salvador García Llanos

El objetivo de RSF es defender la libertad de prensa en el mundo y a los periodistas perseguidos por su actividad profesional.. En el estudio se evalúa las condiciones en las que se ejerce el periodismo en ciento ochenta países y territorios del mundo. Estos indicadores se evalúan sobre un listado cuantitativo de los ataques cometidos contra periodistas y medios, así como del estudio cualitativo de las respuestas de centenares de expertos en libertad de prensa seleccionados por RSF (periodistas, académicos, defensores de los derechos humanos…) a ciento veintitrés preguntas. El cuestionario ha sido actualizado con el fin de reflejar mejor determinados factores, especialmente los relativos a la digitalización de los medios.

España ocupa según el estudio de RSF el puesto número treinta de este listado entre estos ciento ochenta naciones siendo las tres primeros y el modelo a seguir, los países nórdicos (Noruega, Dinamarca y Suecia).

Las conclusiones no pueden ser más pesimistas y negativas ya que el informe señala la existencia de una doble polarización, amplificada por el caos informativo: la polarización mediática, que crea fracturas dentro de los países; y la polarización de los Estados, a escala internacional.

La clasificación destaca los efectos desastrosos del caos informativo, creado por un espacio digital globalizado y sin regular, que favorece las informaciones falsas y la propaganda. En las sociedades democráticas, el desarrollo de medios de opinión al estilo de Fox News y la generalización de los circuitos de la desinformación, impulsada por las redes sociales, están provocando un aumento de las fracturas sociales.

Y lo que muchas veces hemos referido, sobre todo en el plano internacional: la asimetría que existe entre, por una parte, sociedades abiertas y, por otra, regímenes despóticos que controlan a sus medios y sus plataformas, mientras libran guerras de propaganda, debilita a las democracias. En ambos niveles, esta doble polarización es un factor de intensificación de las tensiones.

El modelo a tener en cuenta sigue siendo el de los países nórdicos: se realiza en todo su esplendor en Noruega, Dinamarca y Suecia. Y este año, gracias a sendos cambios de gobierno, Moldavia (40º) y Bulgaria (91º) destacan por la esperanza de tiempos mejores para la situación de los periodistas, aunque los medios sigan mayoritariamente en manos de los oligarcas.

En el estudio de RSF, se refleja una tendencia de hostilidad contra los periodistas pues han sido asimilados erróneamente a las autoridades y han tenido que hacer frente a una hostilidad virulenta por parte de manifestantes contrarios a las medidas de lucha contra el coronavirus. Esta violencia se ha traducido en un elevado número de agresiones físicas en Alemania (16º), en Francia (26º), en Italia (58º) y en Países Bajos (28º), así como en insultos y amenazas de toda índole en todo el continente.