El consejero y portavoz de Asambleas Municipales de Fuerteventura (AMF), Sergio Lloret, ha presentado una moción para que el Cabildo active de forma inmediata un proyecto ya consensuado en la legislatura pasada, que permitiría acabar con el grave peligro que supone actualmente la parada de guaguas de El Matorral, situada junto a la carretera FV-2, una de las más transitadas de la isla.
Lloret denuncia que la actuación —acordada en su día entre el Cabildo y el Ayuntamiento de Puerto del Rosario— ha sido completamente abandonada por el gobierno actual, pese a que existe un diseño técnico viable y el apoyo vecinal para ejecutar la intervención. “No hablamos de una ocurrencia, sino de una solución pactada, lista para activarse, que no se ha ejecutado por pura desidia”, ha declarado.
Actualmente, las personas que usan el transporte público en El Matorral deben cruzar la FV-2 a pie, sin semáforo, sin iluminación y en condiciones de riesgo elevado. El cruce, además de incómodo, ha sido escenario de varios accidentes, algunos de ellos graves. El volumen de tráfico —más de 20.000 vehículos al día— ha desaconsejado hasta ahora la instalación de semáforos, pero existe una alternativa consensuada: un rediseño del acceso de guaguas que evitaría totalmente ese cruce peatonal peligroso y no afectaría a la fluidez del tráfico.
La propuesta de AMF consiste en retomar aquel diseño, que contemplaba mantener una sola parada ampliada en el margen oeste de la FV-2, accesible para guaguas que circulen en ambos sentidos mediante un cambio en la circulación de la calle La Apañada y el uso de las glorietas ya existentes en el entorno. Esto permitiría reorganizar los trayectos sin obligar a los pasajeros a cruzar la vía rápida.
Lloret pide también que el proyecto se incluya en el Plan de Cooperación de Obras y Servicios Municipales (PICOS) y que se coordine directamente con el Ayuntamiento de Puerto del Rosario y con las asociaciones vecinales de la zona, como «Esteras de Genejey» y «El Matorral».
“El gobierno insular no puede seguir mirando para otro lado mientras se pone en riesgo a los vecinos. Esta es una actuación urgente, técnica y socialmente justificada. Cada día de retraso es una irresponsabilidad”, concluyó el consejero de AMF.