David Suárez, portavoz de Coalición Canaria (CC) en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, ha denunciado la situación que atraviesa el área de Parques y Jardines, bajo la responsabilidad de Gemma Martínez Soliño (Unidas Sí Podemos). Esta crítica surge tras la caducidad del contrato de mantenimiento y ornato de las zonas verdes, el último gran contrato de mantenimiento urbano que quedaba en vigor, sin que se haya licitado a tiempo un nuevo servicio.
La combinación de la finalización del contrato y la falta de planificación ha derivado, según Suárez, en un “deterioro evidente” de las zonas verdes, los huertos urbanos y la planificación de acciones de apoyo al sector primario. Además, ha señalado que ha habido numerosas incidencias y una “cascada de pagos” fuera de contrato que deberán asumir los vecinos a través de reconocimientos extrajudiciales de crédito, “con sus correspondientes intereses de demora”, advierte.
Suárez subrayó que, según la liquidación de 2024, el Ayuntamiento consignó 21.373.677,09 euros para Parques y Jardines y solamente ejecutó 6.721.732,08 euros, lo que representa apenas el 31,44%. Quedaron sin utilizar 14.651.945 euros, que pasaron a remanentes de tesorería. “Esto no es casualidad, es el resultado de una gestión clamorosamente deficiente al frente de una de las áreas más importantes. Mientras, nuestros parques se degradan y nuestro arbolado padece esta desidia”, afirma.
El portavoz de CC señaló que la imagen de abandono “se agrava” en espacios emblemáticos como el parque del Estadio Insular, “que está muy lejos de los estándares que merece”. Los nacionalistas recuerdan que organizaciones ciudadanas y ecologistas han criticado su utilización para eventos masivos, alertando sobre el impacto en el arbolado y la vegetación del parque.
“La prioridad debería ser recuperar y conservar esta zona verde, no convertirla en una explanada de eventos. Además, se suma la falta de mantenimiento en elementos singulares y patrimoniales del recinto, que presentan pintadas, suciedad y desperfectos que llevan demasiado tiempo sin resolverse”, subrayó Suárez en sintonía con las quejas de los ciudadanos.
Suárez también criticó que la gestión de Martínez Soliño se haya limitado a actuaciones esporádicas junto al Servicio de Limpieza, “publicitadas como grandes hitos, mientras se descuida el mantenimiento ordinario de nuestros parques, del mobiliario urbano y los parques infantiles”.
“La ciudad sufre una crisis sin precedentes en la gestión de servicios públicos esenciales, de la que no escapan nuestros parques”, añadió Suárez, quien también cargó contra el abandono de “políticas estratégicas” en el área. Así, el portavoz de la formación nacionalista señalar que se han olvidado los huertos urbanos y ha desaparecido el discurso de protección y fomento del sector primario en un municipio con un importante peso agrícola y ganadero, centrado en el distrito Tamaraceite-San Lorenzo-Tenoya.
“La red municipal de huertos, que antaño fue una herramienta de educación ambiental y participación, no aparece en la agenda de Parques y Jardines; son los vecinos quienes, en ocasiones, recuperan parcelas abandonadas por su cuenta y con ayuda comunitaria. Si el Ayuntamiento quiere hablar de ciudad verde, debe empezar por aquí”, advierte.
Por último, el portavoz de CC recordó que el mobiliario urbano no ha tenido la mejor suerte. “No hay novedades claras sobre el contrato de mobiliario urbano, ni ritmo en la renovación de juegos infantiles y elementos básicos. A día de hoy, faltan bancos, sombra, papeleras y fuentes en condiciones en demasiados barrios”, concluyó el edil capitalino.
Sin proyectos
David Suárez también alertó sobre el deterioro del Parque Doramas, donde persisten casetas de personas sin hogar en la antigua terraza ‘El Cielo’, así como nuevas casetas en el parque frente al campo de fútbol Pepe Gonçalvez, en Ciudad Alta. “Esto evidencia la falta de actuaciones sociales y de mantenimiento que devuelvan estos espacios a un uso digno”, comentó.
Suárez también subrayó que la mitad del parque de La Ballena sigue “esperando el sueño de los justos”, sin avances ni calendario, mientras el Barranquillo de Viera (parque de Las Cucas) mantiene un aspecto lamentable por la ausencia de cuidados básicos. “No hablamos de casos aislados, sino de un patrón de dejadez que exige una intervención inmediata y sostenida”, concluyó.