Cerca de 300,000 personas de distintos puntos de la isla han acudido al municipio grancanario de Teror desde el pasado viernes, con motivo de las fiestas de la Virgen del Pino, patrona de Gran Canaria. Así lo ha indicado su alcalde, José Agustín Arencibia, quien ha manifestado sentirse «muy orgulloso» de la afluencia «masiva» lograda.
Este lunes, peregrinos continuaban llegando por las carreteras y caminos que conducen a Teror, para visitar a la virgen, asistir a la parada militar y participar en la misa ofrecida por el obispo de la Diócesis de Canarias, José Mazuelos, así como en la posterior procesión por las principales calles del municipio.
El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, ha presidido los actos oficiales, en los que también han estado presentes las principales autoridades de Gran Canaria, encabezadas por el presidente del Cabildo, Antonio Morales, y de las islas, además del ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres.
El alcalde ha recalcado que la romería de ofrenda a la Virgen, celebrada la tarde del domingo, reunió a unas 45,000 personas, y que la verbena posterior atrajo a alrededor de 65,000. Sin embargo, lo más destacable es que las fiestas están transcurriendo con tranquilidad y sin apenas incidentes.
Arencibia también ha subrayado la participación de los 21 municipios de la isla y del Cabildo en esta celebración, como es tradición.
Además, ha cifrado en más de 70 las intervenciones sanitarias realizadas durante estos días, la mayoría por intoxicaciones etílicas, aunque sin consecuencias graves, así como por heridas, esguinces, luxaciones y malestar. Solo se ha efectuado una derivación al hospital por una caída desde altura, mientras que el resto de los casos fueron atendidos en Teror.
Las intervenciones de los servicios policiales han estado centradas principalmente en la alteración del orden y la retirada de vehículos de la vía pública, registrándose únicamente dos detenciones, según informaron fuentes del Ayuntamiento.