Santa Cruz de Tenerife (EFE).- El Cabildo de Tenerife ha culminado la eliminación total de la arena de sílice en el sistema de tracción y frenado del tranvía, tras un proceso técnico que convierte a la isla en el tercer lugar de España, tras Bilbao y Sevilla, en erradicar completamente este material de su red ferroviaria.
La medida ha permitido que los 26 tranvías de la flota insular operen exclusivamente con silicato de calcio, un compuesto no perjudicial para la salud que ofrece el mismo rendimiento técnico, según ha informado este miércoles la corporación insular.
El proceso ha incluido también la limpieza integral de todos los espacios de trabajo donde se manipuló sílice, garantizando entornos completamente libres de residuos.
Al respecto, la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, ha valorado la culminación de este proceso como una actuación necesaria para mejorar la seguridad operativa del tranvía y proteger la salud de los trabajadores, para subrayar que se trata de una medida concreta con impacto directo en el funcionamiento diario del servicio.
«En tan solo 12 meses, el Cabildo de Tenerife ha logrado resolver un problema complejo de salud laboral y operativa en el sistema de frenado del tranvía, sustituyendo la arena de sílice por un compuesto seguro y eficaz, y descontaminando por completo todas las instalaciones afectadas», ha añadido Dávila.
La retirada de la arena de sílice ha estado acompañada de un proceso de limpieza exhaustiva de todas las instalaciones, depósitos, pasos inferiores, paradas y zonas de vía.
Este trabajo ha sido auditado y verificado por la empresa especializada Inspección y Seguridad de Riesgos, que llevó a cabo inspecciones presenciales y emitió un informe final que certifica la correcta descontaminación de todas las áreas intervenidas.
El informe confirma que las superficies y equipos han quedado libres de restos de polvo de sílice, dando así por cerrado el proceso desde el punto de vista técnico y preventivo. EFE