Madrid (EFE).- Los seis lugares españoles catalogados como Patrimonio Mundial natural de la UNESCO mantienen en 2025 el mismo estado que en 2020, «bueno» en el Parque Nacional del Teide aunque conviene «no bajar la guardia», bueno con matices en Pirineos-Monte Perdido y bajo «preocupación significativa» en Doñana, Garajonay, Ibiza y en los bosques primarios y antiguos hayedos de Madrid, Castilla-La Mancha, Castilla y León y Navarra.
Un informe hecho público este sábado en Abu Dabi durante el Congreso Mundial de la Naturaleza detalla el estado de los 271 sitios patrimonio natural en el mundo, 40 de los cuales tienen carácter mixto por ser también patrimonio cultural.
En España, son patrimonio natural Garajonay, Doñana, el Teide y los bosques y hayedos (en conjunto con los de otros países europeos) y son patrimonio mixto Pirineos-Monte Perdido (compartido con Francia) e Ibiza.
El informe Perspectivas del Patrimonio Mundial 4 de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) es la evaluación más completa de los sitios naturales de la lista del Patrimonio Mundial.
Según el mismo, el Parque Nacional del Teide está incluido entre los 46 lugares en buena situación, aunque las amenazas siguen presentes y conviene no bajar la guardia para mantener una gestión efectiva.
Si un sitio presenta buen estado «con ciertas preocupaciones», caso de Pirineos-Monte Perdido, es porque su situación actual, favorable, solo se mantendrá si se aplican «medidas adicionales de conservación». Hay en el mundo 119 zonas en esta categoría.
Son 88 los lugares «bajo preocupación significativa», que para la UICN significa que sus valores están amenazados y requieren también medidas adicionales. Entre ellos están Doñana, Garajonay, Ibiza y los bosques primarios y antiguos hayedos.
El informe cita el Parque Nacional de Garajonay como un «ejemplo notable» de lugar afectado por el cambio climático: «Los excepcionales restos del bosque de laurel se ven cada vez más afectados por sequías severas y prolongadas y cambios en el hábitat», señala.
Hay 17 lugares en una situación crítica, la mayoría en África. La lista incluye espacios como la reserva del Teneré en Níger, los Everglades en Estados Unidos o la Gran Barrera de Coral en Australia
El cambio climático, la primera amenaza
El cambio climático es la primera amenaza para los sitios naturales catalogados como Patrimonio Mundial, con un 43 % de ellos afectados, seguido por las especies exóticas invasoras, que ponen en peligro al 30 %, y por las actividades recreativas (22 %), según el informe.
El documento también advierte del fuerte aumento del riesgo derivado de las enfermedades de la vida silvestre y de las plantas. El 9% de estos sitios naturales padece una amenaza alta o muy alta de patógenos, un 7 % más que en 2020.
Las distintas amenazas están interconectadas, lo que intensifica su efecto: «Los cambios en las temperaturas y las precipitaciones pueden permitir que los invasores se propaguen más rápido y más lejos y también pueden alterar las condiciones de los patógenos», resume la IUCN, «y el turismo insostenible también puede favorecer su propagación».
Aunque los riesgos son globales, si se pone el foco en distintas regionales las diferencias son significativas.
Así, la caza es el mayor peligro para el Patrimonio Mundial natural en África, el cambio climático lo es en Asia, Mesoamérica y el Caribe, la contaminación del agua lo es en los estados árabes y las actividades recreativas lo son en Sudamérica.
«Proteger el Patrimonio Mundial no es sólo salvaguardar lugares emblemáticos, sino proteger los cimientos mismos de la vida, la cultura y la identidad de las personas en todo el mundo», ha expresado Grethel Aguilar, directora general de la UICN. «Debemos unirnos alrededor de una acción más comprometida sobre el terreno y una mayor inversión para garantizar que estos tesoros irremplazables perduren, para la naturaleza, para las personas y para las generaciones venideras». EFE