El equipo de especialistas gestionó 4.549 consultas en los primeros ocho meses de 2025, de las cuales 1.012 fueron primeras visitas, 3.471 sucesivas de control y 66 de Urgencias
El complejo hospitalario es el único de España que tiene la acreditación de AENOR específica para estos servicios
La unidad de Nutrición Clínica y Dietética del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria, centro adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, atendió un total de 4.549 consultas durante los primeros ocho meses del año 2025. De ellas, 1.012 correspondieron a primeras visitas, 3.471 a revisiones de control y 66 urgentes, lo que supone una media de 120 pacientes nuevos cada mes.
El área de consultas externas de la unidad también ofrece atención especializada para el manejo de la obesidad, la desnutrición y la disfagia. Además, dispone de consultas monográficas centradas en patologías concretas como la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), los errores innatos del metabolismo y la fibrosis quística.
Recientemente, el equipo ha logrado renovar el certificado de calidad UNE 179009, otorgado por AENOR, un distintivo específico para servicios de nutrición clínica que avala la excelencia en la atención nutricional hospitalaria. El Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria es el único centro en España que dispone de esta acreditación, obtenida por primera vez en 2022.
La unidad está integrada por un equipo multidisciplinar compuesto por médicos especialistas, personal de Enfermería con formación específica y técnicos en dietética, que trabajan de manera coordinada para dar respuesta a las diferentes necesidades nutricionales de los pacientes.
Entre sus principales funciones se encuentran el control de los menús dietéticos hospitalarios, la atención a pacientes con desnutrición mediante cribado a través del test CIPA -diseñado y validado por la propia unidad-, así como el tratamiento de personas con incapacidad para ingerir alimentos suficientes y de forma segura. Para ello, se realizan ajustes dietéticos, se prescriben suplementos nutricionales o se indica nutrición por vía venosa u otras vías digestivas mediante sondas.
La aportación de las enfermeras resulta fundamental en el ámbito ambulatorio, tanto en el seguimiento y cuidado de los dispositivos de nutrición por sonda -su mantenimiento y recambio- como en la realización de pruebas de disfagia (incoordinación de la deglución). Asimismo, el equipo realiza un seguimiento estricto de los pacientes que reciben nutrición parenteral en domicilio, una actividad de gran complejidad que ha convertido a la unidad en centro de referencia de la Sociedad Europea de Nutrición Clínica y Metabolismo.