El municipio apuesta por un modelo ecológico de gestión territorial mediante el pastoreo sostenible, colaborando con AGUAVITE y sus ganaderos para preservar el Macizo de Anaga
En el corazón de uno de los espacios naturales más valiosos de Canarias, la Reserva de la Biosfera del Macizo de Anaga, el municipio de Tegueste ha desarrollado un modelo pionero de gestión del paisaje que combina tradición ganadera, prevención de incendios y conservación ecológica. Un rebaño de 400 ovejas, conocidas popularmente como “ovejas bombero”, se encarga de limpiar barrancos, caminos y parcelas, actuando como un eficaz cortafuegos natural mientras se alimentan.
Este proyecto está liderado por los ganaderos José Manuel Trujillo Hernández y Francisco Javier Rodríguez García, integrantes de la Asociación de Guayeros de la Villa de Tegueste (AGUAVITE), y cuenta con el respaldo institucional del Ayuntamiento de Tegueste. El alcalde, Norberto Padilla, ha destacado la importancia estratégica de esta iniciativa, donde el municipio es pionero en la isla de Tenerife: «Estamos apostando por soluciones reales, económicas y respetuosas con el medio ambiente. Este modelo de pastoreo dirigido no solo previene incendios, sino que también impulsa nuestro sector ganadero, favorece el mantenimiento de los ecosistemas y contribuye a un municipio más limpio y sostenible. Es un proyecto que queremos consolidar como ejemplo para toda la isla».
El concejal de Medio Ambiente, Julián Rodríguez, resaltó la importancia de «buscar soluciones eficaces, sostenibles y comprometidas con nuestro entorno» en el marco de una medida implementada en plena Reserva de la Biosfera del Macizo de Anaga, declarada por la UNESCO. «Si esta zona ardiera, perderíamos uno de los tesoros medioambientales más importantes de Canarias. No podemos permitirlo», ha declarado.
Las «ovejas bombero» no son solo un símbolo, sino una herramienta funcional y eficiente. Cada animal consume entre 4 y 5 kilos diarios de materia vegetal seca, que de otro modo actuaría como combustible durante los meses más cálidos. Lo que para muchos es maleza, para estos animales es alimento. El presidente de AGUAVITE, José Luis García Ángel, ha resaltado que este trabajo tiene «un impacto ambiental positivo directo». Destacó que «estas ovejas trabajan. Se comen el problema. Necesitamos que las instituciones se impliquen aún más, que nos ayuden a contratar a una persona que pueda acompañar al ganado y encargarse del desbroce manual de los matorrales altos, que las ovejas no pueden alcanzar. Así, evitamos que esa vegetación se convierta en un foco de incendio».
Un proyecto nacido de la emergencia: respuesta rural al incendio de 2023
Este proyecto, impulsado por el Ayuntamiento de Tegueste a través de las áreas de Medioambiente y Sector Primario, junto a la Asociación AGUAVITE de Tegueste, nació como respuesta a la emergencia vivida en el verano de 2023, cuando un gran incendio afectó a la isla de Tenerife en un contexto de extrema sequía y altas temperaturas. Ante la falta de pasto en los corrales, los ganaderos Trujillo y Rodríguez decidieron soltar sus ovejas para buscar alimento, tal y como ya se hacía en la isla de Gran Canaria. Desde entonces, no han parado de recorrer caminos y barrancos en zonas como El Socorro, Pedro Álvarez, Portezuelo o Molina. «En cada parcela que limpiamos, dejamos una zona más segura y protegida frente al fuego», comenta Francisco Javier Rodríguez. «Hemos aprendido de nuestros compañeros de Gran Canaria, donde este modelo ya está consolidado. Allí los rebaños llevan GPS, y los pastores reciben una compensación por hectárea pastoreada. El seguimiento técnico permite medir resultados reales, y los costes son menores que los de una cuadrilla de limpieza. Queremos llegar a ese nivel aquí también.»
El objetivo es lograr una integración total del pastoreo dirigido dentro de las políticas públicas de protección del entorno rural y forestal, garantizando así la continuidad de un modelo de ganadería activa y funcional. Por ello, a nivel europeo se ha lanzado la campaña “Más pastoreo, menos postureo”. La respuesta de los vecinos del municipio ha sido muy positiva. Muchos residentes han expresado su satisfacción con la presencia del ganado en zonas de riesgo, valorando tanto el impacto ambiental como la recuperación de una práctica tradicional que vuelve a tener un papel clave en la protección del paisaje rural y forestal.
Con este proyecto, Tegueste se posiciona como un municipio referente en la defensa del territorio mediante estrategias naturales, respetuosas con la biodiversidad, sostenibles a largo plazo y económicamente viables. Las “ovejas bombero” no solo pastan: trabajan, limpian y protegen un entorno que es patrimonio de todos.