Santa Cruz de Tenerife (EFE).- La directora del Observatorio de Derechos Sociales de Canarias (Odesocan), Emma Colao, ha pedido este jueves al Parlamento de Canarias que declare la emergencia habitacional en el archipiélago para que se habiliten medidas extraordinarias para afrontar la crisis de acceso a la vivienda, que afecta a miles de familias y repercute directamente en la salud mental de la población.
Emma Colao, en declaraciones a los medios de comunicación antes de participar en una comisión parlamentaria como compareciente para hablar sobre estado del sistema público de servicios sociales y la afectación del derecho a la vivienda sobre la salud de la población, ha informado de que va a registrar hoy esta solicitud ante la Mesa del Parlamento para que se declare a toda Canarias zona tensionada en base a la ley de vivienda estatal.
Según el informe de vivienda y salud mental elaborado por Odesocan, la falta de alternativas habitacionales asequibles ha generado un incremento de la medicalización de la población.
En 2024 se produjeron más de 1.700 desahucios, mientras que Canarias acumula más de 211.000 viviendas vacías y 55.000 permisos de vivienda vacacional, lo que agrava la presión sobre el mercado de alquiler, ha advertido.
De acuerdo con el estudio, por cada millón de turistas que recibe el archipiélago, el precio del alquiler aumenta 0,32 euros por metro cuadrado, lo que sostiene que refleja la relación directa entre el modelo económico basado en turismo y el acceso limitado a la vivienda.
El informe analiza datos desde 2007, incluyendo itinerancia en centros de atención primaria, consumo de antidepresivos y disponibilidad de vivienda, identificando una correlación entre el incremento del precio del alquiler, la disminución de viviendas disponibles y el aumento de problemas de salud mental.
En este contexto, Canarias registra un consumo de unos 230.000 antidepresivos al día, lo que refleja la dependencia de la medicación para afrontar la falta de acceso a derechos básicos como vivienda, alimentación o empleo, ha indicado Colao.
A su juicio, la crisis habitacional ha llevado a un fracaso sistemático de las instituciones locales en garantizar estos derechos.
Según ha defendido, la declaración de emergencia habitacional permitiría aplicar medidas extraordinarias, como la asignación de fondos presupuestarios adicionales para vivienda, la construcción de vivienda pública, la regulación de la vivienda vacía y vacacional, y la implementación de un plan de vivienda y salud mental en toda la comunidad autónoma.
Asimismo, ha recordado que las competencias en materia de vivienda están en Canarias, y que es urgente que las instituciones locales asuman su responsabilidad y dejen de fracasar en la protección del derecho a la vivienda.
Además, ha matizado que el problema de la vivienda no es la ocupación sino la ausencia de alternativas habitacionales accesibles.
En su opinión, la presión sobre la vivienda genera situaciones de estrés y ansiedad, aumenta la dependencia de psicofármacos y agrava problemas de salud mental que afectan tanto a adultos como a menores.
Según el informe, la relación entre la presión del alquiler, el turismo y el consumo de antidepresivos evidencia que el modelo económico actual impacta de manera directa en la calidad de vida de los residentes.
En definitiva, la iniciativa de Odesocan busca que el Parlamento de Canarias reconozca la urgencia de la crisis habitacional y adopte medidas inmediatas que garanticen acceso a vivienda digna, reducción de desahucios y mitigación de los efectos psicológicos derivados de la precariedad habitacional, consolidando un enfoque integral que combine urbanismo, economía, turismo y salud pública. EFE
















