Las Palmas de Gran Canaria (EFE).- La Consejería regional de Educación y los sindicatos del sector han acordado que a partir del próximo curso y hasta el de 2027-2028 se apliquen reducciones progresivas de ratios en Infantil, Primaria y Secundaria en el marco del plan trianual promovido por la Administración para tal fin.
Tras un mes de reuniones, las partes han consensuado reducir progresivamente el número de estudiantes por aula a 16, 18 y 20 como máximo en los niveles de 3, 4 y 5 años de Educación Infantil, bajar a un mínimo de 22 en Primaria y fijar un tope de 25 en Secundaria, lo que el consejero Poli Suárez ha valorado como «la apuesta más ambiciosa realizada hasta la fecha en nuestra tierra por una educación inclusiva, equitativa y de calidad».
Esta propuesta, dada a conocer este martes y que afecta a las aulas de los centros públicos no universitarios del archipiélago, supone actualizar el acuerdo para la mejora del sistema público educativo de Canarias entre Administración y sindicatos, firmado en 2022, y que cuenta con el respaldo mayoritario de los participantes en las negociaciones, según destaca la Consejería en una nota.
Para Suárez, esta propuesta «demuestra la predisposición permanente» de su departamento «al diálogo y al consenso para recoger aquellas aportaciones que se planteen con el propósito de mejorar el sistema educativo de las islas».
El consejero celebra que estas medidas «cuenten con el apoyo del conjunto de la comunidad educativa, con la que se ha ido de la mano para seguir con esta misión y con la que se seguirá trabajando para que la mejora no quede en este hito, sino que siga aumentando en el futuro a corto plazo».
El responsable regional de Educación ha precisado que este plan prevé la incorporación de 304 maestros y maestras de Educación Infantil y de Educación Primaria, cuya ratio de alumnado, en la segunda de estas etapas, permanecía sin modificarse desde el año 1991, por lo que «el tope planteado por la Consejería posiciona a Canarias entre las comunidades con menor número de estudiantes en las aulas, junto con Aragón o Castilla y León, ambas con un máximo de 22 alumnos».
La propuesta, además, determina la posibilidad de una ratio incluso menor (20), en aquellas clases donde esté escolarizado alumnado con necesidades educativas especiales o alumnado con trastorno grave de conducta o trastorno grave de la comunicación o del lenguaje, precisa la nota.
Para Educación Secundaria se incorporarán 359 profesores y, con la ratio máxima de 25 estudiantes por clase para cada uno de los cursos, desde 1º a 4º de ESO, las islas serán una de las ocho comunidades que ha reducido la ratio máxima de 30 establecida para todo el Estado, equiparándose a las comunidades que presentan el límite más bajo, como Asturias (23), País Vasco (25) o Galicia (25).
En el caso de contar el grupo con alumnado con necesidades educativas especiales o alumnado con trastorno grave de conducta o trastorno grave de la comunicación o del lenguaje, la ratio descenderá hasta 22.
En cuanto a la etapa de Educación Infantil, en el segundo ciclo se reducirá la ratio de 18 a 16 en el nivel de 3 años y a 18 y 20 en los niveles de 4 años y 5 años respectivamente, desde los 23 actuales.
De igual forma se reducirá la ratio máxima en aquellos grupos donde, por tener un número reducido de alumnado, se prevea la constitución de grupos con mezclas entre dos niveles. Esta reducción situará a Canarias con la mejor relación alumnado-profesorado de todo el Estado en esta etapa educativa, subraya Suárez.
Con respecto a los recursos para la atención a la diversidad, el nuevo documento incorpora una mejora sustancial en el personal de Orientación con, al menos, 122 nuevos profesionales, bajando la ratio a un docente por cada 250 alumnos de Educación Infantil y Primaria y posibilitando que los centros de Secundaria con más de 800 estudiantes dispongan de dos orientadores en plantilla, así como el mantenimiento de la mejora realizada para este curso de 47 y 135 docentes de la especialidad de Audición y Lenguaje y de Pedagogía Terapéutica, respectivamente.
Además, se asignará profesorado de refuerzo para la mejora de las competencias en comunicación lingüística y matemáticas en el 15 % de los centros que presenten resultados más bajos en las evaluaciones de diagnóstico que se realizan cada curso escolar.
Para Anpe, sindicato mayoritario entre los docentes del archipiélago, la modificación del acuerdo para la mejora del sistema público educativo de Canarias firmada este martes «es un avance parcial, pero indudable, para la enseñanza no universitaria de la comunidad autónoma, fruto de la acción sindical desarrollada en los últimos años».
A juicio de esta organización, «el plan se inspira en el que presentó» esta organización «a la Consejería de Educación el curso pasado, aunque su alcance es más limitado en varios aspectos».
En cualquier caso, para el presidente de Anpe, Pedro Crespo, «permitirá atender de forma más individualizada al alumnado en gran parte de la enseñanza básica y en educación infantil».
«Se trata de un paso importante en la mejora de la calidad educativa y de las condiciones laborales del profesorado, que habrá que consolidar con futuros avances», ha manifestado en un comunicado. EFE