La consejera de Bienestar Social, Candelaria Delgado, señala que el objetivo es que puedan autocuidarse de manera efectiva para ofrecer unos cuidados de calidad
La Consejería de Bienestar Social, Igualdad, Juventud, Infancia y Familias del Gobierno de Canarias incorporará un servicio de apoyo dirigido al colectivo de personas cuidadoras familiares de mayores aprovechando el potencial de la innovación tecnológica. La consejera de Bienestar Social, Candelaria Delgado, señala que en la actualidad se están trabajando para poner en marcha una app para dispositivos móviles dirigida a las personas cuidadoras no profesionales con una serie de servicios y dinámicas formativas y de apoyo psicosocial, accesibles en remoto, orientadas a mejorar sus capacidades para autocuidarse de manera efectiva, y para ofrecer a su familiar unos cuidados de calidad. La nueva aplicación móvil está financiada a través de los fondos Next Generation Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR).
“Queremos proporcionar a la persona cuidadora conocimientos, estrategias y herramientas específicas que le permitan enfrentarse con éxito a los importantes retos que se producen en el día a día del cuidado de su familiar mayor. También queremos contribuir a la reducción de la sobrecarga y la ansiedad de la persona cuidadora, gracias al acompañamiento de un equipo de especialistas en cuidado familiar y favorecer la permanencia en el hogar de la persona mayor”, señala Delgado.
Este servicio pretende dar respuesta a cuestiones tan relevantes como el factor de género en los cuidados a personas mayores -son principalmente las mujeres de las familias quienes cuidan-, la salud mental, o la soledad no deseada (las personas cuidadoras no profesionales tienden a aislarse progresivamente).
Las personas cuidadoras familiares constituyen un colectivo fundamental y un pilar clave del sistema de cuidados. Según los datos de la Tesorería General de la Seguridad Social, en Canarias hay 4.223 personas en el convenio especial de cuidadores no profesionales de personas en situación de dependencia, mientras que en el Estado español la cifra asciende a 95.372.
La ONU estableció en 2014 el día 5 de noviembre como el Día Internacional de las Personas Cuidadoras con el objetivo de reconocer y honrar la labor de quienes cuidan a personas dependientes, enfermas o con discapacidad, ya sean profesionales o familiares. Dicha fecha se celebra para concienciar sobre su trabajo y los desafíos que enfrentan.
Estas personas están sometidas a una situación de vulnerabilidad derivada de un deterioro físico, emocional y social que va aumentando conforme se prolongan en el tiempo las situaciones de cuidados. El deterioro, conocido como el burnout de la persona cuidadora no profesional, produce una merma en su bienestar y calidad de vida que afecta a su labor, por lo que es necesario establecer medidas y facilitar herramientas que mejoren su actividad diaria.
















