El Instituto Español de Oceanografía (IEO-CSIC) ha presentado en el puerto de Santa Cruz de Tenerifeel buque oceanográfico Odón de Buen, que visita por primera vez Canarias. El buque es considerado el más moderno, sostenible y de mayor tamaño de la flota científica española. El acto institucional reunió a representantes de las administraciones, universidades canarias, centros de investigación y medios de comunicación, donde se destacó la relevancia del buque como herramienta clave para la investigación marina en Canarias.
El Odón de Buen es el mayor buque oceanográfico de la flota española. Con casi 85 metros de eslora, 18 de manga y capacidad para 58 personas, está diseñado para operar en cualquier océano del planeta y realizar investigaciones punteras sobre biodiversidad marina, cambio climático y otros grandes retos oceánicos. Su construcción, encargada al astillero Armón (Vigo), ha contado con la participación de más de 200 profesionales y 25 empresas, con una inversión total de 85 millones de euros, financiados por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades con apoyo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional.
Destaca por su diseño innovador y sostenible, gracias a un sistema de propulsión híbrido diésel-gas que reduce significativamente las emisiones contaminantes. Por sus capacidades técnicas, tecnología de vanguardia y enfoque multidisciplinar, el Odón de Buen está llamado a convertirse en un buque de referencia para la investigación marina durante las próximas décadas.
“El buque es un modelo de cooperación público-privada que pone a la investigación oceanográfica española a la vanguardia mundial. Su tecnología puntera está puesto no sólo al servicio de la ciencia sino al servicio de la mejor convivencia a bordo”, recalcó Carlos Closa, vicepresidente de Organización y Relaciones Institucionales del CSIC.
“La capacidad de este buque permite realizar diferentes estudios de investigación de forma multidisciplinar y con tecnología de última generación, tanto estudios de campo sobre clima, pesca sostenible o biodiversidad marina”, concluye Rosa Figueroa, directora del IEO.