La Laguna (Tenerife) (EFE).- La artista visual Fabiola Ubani ha inaugurado este sábado la exposición “El presente infinito”, un recorrido retrospectivo de tres décadas de creación que reúne un centenar de obras en las que el tiempo, la memoria y la transformación se materializan a través de técnicas como el aguafuerte, la litografía, el fotograbado o el montaje.
La muestra, comisariada por Antonio P. Martín, estará disponible hasta el próximo día 19 de octubre en la Sala del Instituto Canarias Cabrera Pinto, en el municipio tinerfeño de La Laguna.
Ubani invita a los visitantes a reflexionar sobre la relación entre distintos binomios como destrucción y creación, amor y deseo, belleza y sufrimiento o fragilidad y permanencia, mediante una visión profunda sobre las contradicciones inherentes al ser humano y a la naturaleza misma del arte.
“Esta es una retrospectiva a 30 años de trabajo, pero que no está presentado en orden cronológico. En una parte hay grabados, algunos que hice entre 1989 y 1996, pero también hay fotografía, porque siempre me ha gustado mucho. En la serie “Deseo”, por ejemplo, se combinan ambas técnicas. En definitiva, es un camino que he seguido, como una especie de diario visual de mi vida”, ha explicado Ubani.

La artista, ha continuado, eligió el título de la exposición para hacer un guiño a lo que “puede ser la fotografía”, una idea que queda plasmada en un momento determinado y “uno la vuelve a ver” y “siempre está presente en tu vida”, salvo que se deteriore o el tiempo pase por ella.
Un concepto para el comisario de la exposición puede tener muchas interpretaciones, ya sea a través del tiempo eterno o atemporal, como algo subjetivo a cada persona, una invitación al espectador a crear su propia visión y percepción, lo que permite la formación de una propia conciencia y sentido de la existencia al contemplar las obras.
Entre las series que componen la muestra se encuentran “Desierto” (1992), “El país de la memoria” (1994) y “Odisea” (1995) con técnica de aguafente, “Deseo” (2000) con aguafuente, gomas bicromatadas y positivados, así como “Cárites” (2003), con aguafuente, litografía y positivados.
A los que se suman “Frente al espejo” (2008), realizado mediante litografías, “Espacios de silencio” (2005), con fotograbados, “Galateas” (2008), en fotografía digital y las series de fotomontajes de “El tiempo detenido” (2008) y “Ciudad(es)” (2013). EFE