Santa Cruz de Tenerife (EFE).- Un equipo científico internacional en el que participan investigadores del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) ha estudiado en detalle «un sistema extraordinario de galaxias enanas que danzan juntas en medio de la nada» dentro de una región deshabitada del Universo, en el vacío cósmico.
Esta inusual pareja de galaxias de baja masa, ha explicado el IAC este miércoles en una nota, ofrece una perspectiva «única» sobre las interacciones individuales y la evolución de galaxias situadas en ambientes de densidad muy reducida.
El equipo de investigación del proyecto Calar Alto Void Integral-field Treasury surveY (CAVITY), liderado por la Universidad de Granada, ha descubierto que la fusión, poco común, se encuentra todavía en curso entre dos galaxias enanas situadas en lo más profundo de un vacío cósmico, en una de las regiones menos pobladas del Universo.
«Las fusiones de galaxias son eventos que desempeñan un papel clave en como estas crecen, cambian y forman nuevas estrellas. Cuando las galaxias colisionan, las fuerzas gravitatorias provocan intercambios de gas y estrellas, estallidos de formación estelar y alteraciones estructurales», ha añadido la institución investigadora.
Aunque las fusiones entre galaxias masivas han sido ampliamente estudiadas, «capturar un evento de este tipo entre galaxias enanas de baja masa es extraordinariamente raro, especialmente en un entorno tan vacío».
En términos de materia ordinaria (estrellas, gas y polvo), cada una de estas galaxias enanas tiene menos de una vigésima parte de la masa de la Vía Láctea, sin contar la materia oscura.
“Esta fusión es inusual en varios aspectos,” ha explicado Bahar Bidaran, autora principal del estudio e investigadora postdoctoral en la Universidad de Granada, que ha agregado que la mayoría de las fusiones ocurren en entornos densos de grupos de galaxias o involucran pares con masas desiguales.
Sin embargo, ha continuado, este sistema no sigue ninguno de esos patrones.
«Especulamos que la dinámica global del vacío, o quizás una interacción pasada de tres cuerpos con otra galaxia enana cercana, pudo haber desencadenado este encuentro único”, ha declarado.
El sistema en fusión posee una masa estelar combinada de poco menos de 10.000 millones de masas solares y el equipo detectó discos gaseosos en rotación y una fuerte emisión de gas ionizado, señales de una explosión de formación estelar probablemente inducida por la fusión.
Gracias a que el sistema está alineado de forma favorable, el equipo científico pudo medir la masa dinámica de cada una de las galaxias progenitoras.
Además, las imágenes ópticas profundas del Telescopio Isaac Newton (INT), situado en el Observatorio del Roque de los Muchachos, en La Palma, revelaron una distribución de polvo sorprendente: dos estructuras arqueadas conectadas que podrían haberse formado por frentes de choque generados durante la fusión.
Según los datos, ambas galaxias progenitoras eran probablemente de tipo disco y con formación estelar, típicas de aquellas que se encuentran en vacíos cósmicos.
Este descubrimiento abre una «valiosa ventana» para comprender cómo evolucionan las galaxias en entornos de densidad extremadamente baja, lejos de la red cósmica donde ocurre la mayoría de las interacciones galácticas.
“Esta fusión es un recordatorio impactante de que, incluso en las regiones más solitarias del cosmos, las galaxias pueden experimentar transformaciones dramáticas”, ha afirmado Jesús Falcón-Barroso, investigador del IAC y coautor del trabajo.
“Observar un evento tan raro en un vacío cósmico proporciona una pieza clave del rompecabezas para comprender cómo se forma y evoluciona la estructura en los entornos más inexplorados del Universo”, ha aclarado. EFE