Santa Cruz de Tenerife (EFE).- Los centros educativos de Canarias han manifestado este martes en el Parlamento regional su rotunda condena a cualquier expresión de acoso escolar y han pedido que se preste especial atención al uso de tecnologías y redes sociales para así prevenir el ciberacoso, «fórmula que amplifica exponencialmente la gravedad del problema».
«Creemos firmemente que la acción educativa debe desarrollarse en un clima de convivencia sano y adecuado, donde las alumnas y alumnos sintamos que ese espacio es un lugar seguro», han afirmado los alumnos del CEIP Domínguez Alfonso, en el municipio tinerfeño de La Orotava.
Los alumnos, que han leído un manifiesto acompañados de la presidenta del Parlamento de Canarias, Astrid Pérez, han considerado «intolerable» que un niño, niña o adolescente acuda a diario a su centro con el temor silencioso a recibir insultos, amenazas u otro tipo de actitudes que atenten contra su dignidad.
Según han defendido, los centros educativos de Canarias deben ser espacios para el aprendizaje, el intercambio de valores, el crecimiento social y el enriquecimiento emocional, sellando toda grieta por la que pueda filtrarse el maltrato.
Para los escolares, el acoso, ya sea físico, verbal, emocional o social, acarrea graves consecuencias a corto, medio y largo plazo.
«Los daños que ocasiona pueden llegar a resultar irreparables, por lo que se hace imprescindible permanecer alerta para, desde el centro, garantizar la convivencia pacífica en las aulas, el respeto a la diversidad, la protección de nuestros derechos y deberes y, en definitiva, la expulsión para siempre de cualquier actitud favorecedora de agresiones», han agregado.
Asimismo, han abogado porque las respuestas ante cada posible caso de acoso sean firmes y contundentes, «trabajando codo con codo con las familias» y han resaltado que es fundamental la implicación de las instituciones y entidades sociales.
«En el acoso escolar no caben pretextos ni excusas. No son juegos; tampoco son cosas de niños», han esgrimido, al tiempo que han comentado que son acciones cobardes premeditadas que pretenden hostigar, perseguir y destruir a la víctima.
«Desde los colegios e institutos de Canarias, queremos decirles a las víctimas que salgan de su silencio, que acudan a los recursos habilitados para combatirlo y que cuentan con todo el respaldo del profesorado y equipos directivos».
La denuncia valiente
También han hecho hincapié en el importante papel que los alumnos observadores desempeñan en el marco del acoso escolar, porque «su denuncia valiente es una herramienta esencial para combatir este problema tan complejo».
Por último, han añadido que la firma de este manifiesto conlleva la responsabilidad de la lucha contra el acoso escolar y el compromiso de visibilizarlo, con el objetivo de prevenir cualquier conducta lesiva para la convivencia en las aulas.
El CEIP Domínguez Alfonso, movido por «su compromiso firme en la lucha contra el acoso escolar», ha promovido la iniciativa ‘Manifiesto Canario contra el Acoso Escolar’.
El centro, que pretende trasladar la iniciativa a todos los colegios e institutos de Canarias, ha redactado este manifiesto a través del que se intenta promover la convivencia pacífica en las aulas, el respeto a la diversidad, la protección de los derechos y deberes del alumnado y, en definitiva, la “expulsión para siempre” de cualquier actitud favorecedora de acoso escolar.
El Manifiesto Canario contra el Acoso Escolar ha sido presentado en el Parlamento de Canarias por el alumnado de 4º de Educación Primaria, alumnado mediador de los seis niveles de Primaria, alumnado del Aula Enclave de Primaria y un alumno representante en el Consejo Escolar del centro.