Santa Cruz de Tenerife (EFE).- Un grupo de mujeres con discapacidad han leído este miércoles un manifiesto en el Parlamento de Canarias para denunciar que viven en un sistema «que muchas veces nos ignora, nos trata como niñas o no nos deja decidir».
Según han alertado, las mujeres con discapacidad sufren muchas formas de discriminación: por ser mujeres, por tener una discapacidad, por ser mayores o jóvenes, por vivir en pueblos o islas pequeñas, por ser madres o por su origen.
Por ello, han reclamado igualdad, justicia y vivir con dignidad, al tiempo que han criticado que las mujeres con discapacidad en Canarias tienen dificultades para encontrar trabajo, sufren más violencia de género y también tienen más barrera para acceder a ayudas, servicios y derechos.
Se han centrado en la violencia machista que sufren «muchas» mujeres con discapacidad pero «pocas» logran denunciar o conseguir ayuda legal porque hay barreras que lo impiden, ya que los edificios judiciales no son accesibles, no hay intérpretes ni documentos fáciles de leer y nadie las cree ni escucha.
«Muchas mujeres y niñas con discapacidad sufren violencia. A veces en casa. Otras veces en centros o por personas que cuidan de ellas», han manifestado, al tiempo que han resaltado que incluso hay mujeres que tienen una discapacidad porque han sufrido violencia machista.
También han indicado que no se ha respetado su cuerpo y a muchas mujeres con discapacidad se les ha esterilizado sin permiso, no se les ha dado información clara sobre anticonceptivos y se les ha tratado como si no pudieran ser madres.
Han insistido en que tienen derecho a disfrutar de su sexualidad sin miedo ni prejuicios, recibir atención médica sexual y reproductiva avanzada, así como que se prohíban las esterilizaciones forzadas.
Asimismo, han avisado de que muchas personas con discapacidad no pueden entender lo que dicen los periódicos, la televisión o internet porque los mensajes no están en lectura fácil o en formatos accesibles.
Han recordado que la accesibilidad universal significa poder entrar en los edificios, entender la información, usar transporte y vivir con independencia.
En resumen, han agregado, el manifiesto que han defendido es «un grito claro» que pide vivir con igualdad, respeto y libertad, tener voz en lo que les afecta y una vida autónoma y digna.
En este contexto, la ley de promoción de autonomía persona debe ayudarlas, pero también hace falta voluntad, compromiso y acción, han hecho hincapié.
La Cámara legislativa autonómica ha acogido el primer «Parlamento canario de mujeres con discapacidad», una iniciativa en la que han participado representantes del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), que pretende hacer visible la situación de este colectivo e impulsar el primer manifiesto canario en este ámbito.
La presidenta de CERMI en Canarias, Carmen Laucirica, ha insistido en que las mujeres con discapacidad, que lo tienen aún más difícil, son ciudadanas con todos los derechos.
Por su parte, la presienta del Parlamento de Canarias, Astrid Pérez, ha reiterado su compromiso con la discapacidad, especialmente en las mujeres, pues el 50% de ellas ha sufrido violencia machista, ha lamentado. EFE