La Maritime Just Transition Task Force (MJTTF) publicó el pasado mes de septiembre los primeros programas destinados a la formación de la gente de mar en el uso de combustibles alternativos como el amoniaco, el metanol y el hidrógeno. Se trata de la primera iniciativa de este tipo a nivel internacional y busca armonizar los estándares globales de capacitación para la transición energética del transporte marítimo.
Dichos programas, que incluyen materiales para los instructores y guías de apoyo, establecen los criterios básicos de conocimiento, competencia y seguridad necesarios para operar buques propulsados por estos nuevos combustibles. Están dirigidos tanto para el personal operativo y de nivel inicial como oficiales de alto rango, y pueden ser utilizados por autoridades marítimas, centros de formación y navieras para desarrollar sus propios programas de entrenamiento, certificación y validación de competencias.
La Task Force, una alianza creada por la Organización Marítima Internacional (OMI), la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF) y la Cámara Naviera Internacional (ICS), desarrolla este proyecto en colaboración con la Secretaría de la OMI, Lloyd’s Register (a través de su Maritime Decarbonisation Hub) y la Universidad Marítima Mundial (WMU). El proyecto cuenta con la cofinanciación de la OMI y de Lloyd’s Register Foundation.
Estos marcos formativos están dentro del proyecto ‘Baseline Training Frameworks for Seafarers in Decarbonisation’ (Marcos básicos de formación para la descarbonización destinados a la gente de mar), desarrollado a la vez que la revisión integral del Convenio STCW, actualmente en curso en la OMI. Los resultados del proyecto servirán como aporte técnico para la definición de nuevas competencias relacionadas con la descarbonización, que se incorporarán al STCW.
La Task Force también prepara unas directrices destinadas a tripulantes y personal en tierra que no están directamente cubiertos por el STCW, con el fin de ofrecer conocimientos básicos sobre la manipulación y los riesgos asociados a los nuevos combustibles.