Esta hacienda ubicada en Arucas, cuenta con 8.500 plataneras de múltiples variedades y a través del espacio Mundo del Plátano se ha convertido en un reclamo para visitantes interesados en conocer la cultura agrícola ligada a este cultivo
Este proyecto de economía circular abarca también la elaboración de productos agroalimentarios a base de plátano, como mermeladas o licores, así como artículos con fibra de platanera, entre ellos bolsos o cestas
Los consejeros de Agricultura, Ganadería, Pesca y Soberanía Alimentaria y de Educación, Formación Profesional, Actividad Física y Deportes, Narvay Quintero y Poli Suárez han visitado la Hacienda La Rekompensa, en el municipio grancanario de Arucas, para conocer las instalaciones del centro de interpretación Mundo del Plátano, el primer espacio dedicado a este cultivo en Gran Canaria, que a lo largo de los últimos años se ha convertido en un referente turístico y ejemplo del potencial del sector primario de Canarias para brindar a los visitantes del archipiélago una experiencia única.
Acompañados por el alcalde de Arucas, Juan Jesús Facundo, y los concejales de Servicios Públicos y Agricultura, José Lorenzo Montesdeoca, de Presidencia y Promoción Económica, Oliver Armas; y de Urbanismo, Sebastián Guerra, los miembros del Ejecutivo regional recorrieron junto a los impulsores de la iniciativa, Rubén García y Katleen Van den Bosch, esta finca donde confluyen la actividad agrícola con la elaboración de productos agroalimentarios y artículos de artesanía a base de fibra de plátano en una instalación pionera en economía circular basada en uno de los cultivo más representativo del archipiélago.
Con una extensión de 56.500 m² y en torno a 8.500 plataneras, así como 150 aguacateros y gran diversidad de frutales, en el marco de este proyecto se han recuperado tierras en desuso desde 1965 así como una hacienda canaria de 1804, que ha sido restaurada de acuerdo a su arquitectura original, para brindar a los visitantes una experiencia de divulgación de la cultura platanera de Canarias, dirigida especialmente a turistas y grupos de centros educativos.
Acerca de esta iniciativa, Narvay Quintero señaló que “ejemplifica perfectamente el potencial que nuestro sector primario tiene como factor diferenciador que amplía el atractivo de Canarias más allá del destino de sol y playa”. Asimismo, añadió, “contribuye de manera significativa a la dinamización económica de las zonas rurales, al mantenimiento de actividad agrícola y a la divulgación de un patrimonio que, a través de estas experiencias culturales y gastronómicas, cada vez suscita mayor interés en quienes nos visitan”.
Por su parte, el consejero de Educación, Poli Suárez, destacó “el valor educativo” de proyectos como La Rekompensa “porque de esta manera conseguimos que el alumnado conozca de primera mano cómo se trabaja un producto tan presente en nuestra vida como el plátano y qué hay detrás de este cultivo”. En la misma línea, subrayó que visitas así “nos permiten entender mejor nuestra tierra, nuestra identidad, y muestran profesiones reales, con lo que esto supone para un aprendizaje práctico, conectado con la realidad, y que no solo se queda en el libro”.
En sus instalaciones, además de conocer el proceso de cultivo de múltiples variedades de este producto emblemático de Canarias, entre ellas el exótico plátano azul o ejemplares que alcanzan hasta ocho metros de alto, los visitantes pueden degustar una selección de distintas producciones como mermeladas, bizcochos, dulces, licores o vino de plátano, así como adquirir estas elaboraciones artesanales producidas en Canarias en la tienda del establecimiento, donde también se ofrece una línea cosmética basada en el plátano.
Por otra parte, La Hacienda La Rekompensa también colabora con diversas artesanas, con el apoyo investigador de un experto ingeniero, para dar una segunda vida a los residuos de la platanera convirtiéndolos en artículos como bolsos, lámparas o cestas. A partir de estas fibras de platanera, además, se confeccionan imanes o regalos de empresa gracias a la resistencia de este soporte a la impresión 3D, de manera que ofrecen una alternativa biodegradable al uso de plásticos en procesos industriales.

















