Esta acción busca que las personas que han tenido un infarto de miocardio mantengan su colesterol LDL por debajo de 55 mg/dL
Hasta el 80 por ciento de los eventos cardiovasculares prematuros se pueden evitar con cambios en la alimentación, el ejercicio y el abandono del tabaco
El servicio de Cardiología del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria, centro adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, presentó hoy la campaña ‘Tu Línea Roja 55’ que busca concienciar a los pacientes que han sufrido un infarto de miocardio sobre la importancia de reducir el colesterol LDL (comúnmente llamado ‘colesterol malo’) a los 55 mg/dL para evitar un nuevo evento.
A la presentación de la campaña acudieron la directora del Área de Salud de Tenerife, Diana Mora; la directora de Enfermería del complejo hospitalario, Mercedes García; el subdirector médico, Pablo Suárez; el jefe de servicio de Cardiología, Julio Hernández; y el presidente de Cardioalianza, Tomás Fajardo.
CardioAlianza es una asociación que agrupa a 47 organizaciones de atención en toda España, dedicadas a mejorar la calidad de vida y el bienestar de las personas con patologías cardiovasculares.
La iniciativa, que cuenta también con el apoyo de la farmacéutica Novartis, se desarrollará hasta el 13 de septiembre en el hall del hospital y se complementa con una plataforma interactiva diseñada bajo el lema ‘Después de un infarto de miocardio u otro evento vascular aterosclerótico, tu colesterol LDL tiene un límite. Tus ganas de disfrutar, no’, así como herramientas para interpretar las analíticas a través de una guía descargable.
La directora del Área de Salud de Tenerife expuso que “esta campaña es clave para promover hábitos saludables y acompañar a los pacientes en la prevención secundaria tras un infarto, ayudándoles a mantener una vida más segura y de calidad. Desde el Servicio Canario de la Salud reafirmamos nuestro compromiso con la educación en salud, la promoción de hábitos saludables y la colaboración con profesionales y asociaciones para acompañar a quienes han sufrido un infarto en su camino hacia una vida más saludable”.
El jefe del servicio de Cardiología explicó que la prevención secundaria es fundamental porque, “tras un primer infarto, el riesgo de sufrir un nuevo evento cardiovascular es muy elevado, especialmente en los primeros meses”. Añadió que la evidencia científica ha demostrado que, con un control óptimo de los factores de riesgo se puede reducir de forma significativa la recurrencia de eventos y la mortalidad.
Por su parte, el presidente de CardioAlianza subrayó que, “adoptar hábitos de vida saludables y seguir de forma activa las recomendaciones médicas es crucial para las personas que han sufrido un evento cardiovascular reciente”. Además, animó a todos a “apoyarse en las asociaciones de pacientes puesto que ofrecen acompañamiento, información y recursos que ayudan a mantener la motivación y a afrontar el cambio de hábitos”.
La directora de Comunicación y Pacientes de Novartis España, Esther Espinosa, afirma que “en Novartis vamos más allá del desarrollo de medicamentos innovadores. Aspiramos a ser agentes de cambio en la sociedad, promoviendo la prevención como una herramienta fundamental para combatir una de las principales causas de mortalidad en nuestra población”.
Las enfermedades cardiovasculares
Una de cada cuatro personas que ha tenido un infarto de miocardio experimenta otro evento vascular aterosclerótico en los dos años siguientes, por lo que, para evitarlo, se recomienda que aquellas con muy alto riesgo de este suceso mantengan un nivel de colesterol LDL.
Sin embargo, más del 80% de los pacientes con esta patología establecida no cumple con este objetivo, un dato relevante teniendo en cuenta que es el principal factor modificable y causal de la enfermedad vascular aterosclerótica (EVA).
La EVA se refiere a una variedad de patologías causadas por el desarrollo y crecimiento de placas en el revestimiento interno de las arterias. La placa aterosclerótica está compuesta principalmente por colesterol unido a lipoproteínas de baja densidad (c-LDL) que se acumula con el tiempo. La exposición acumulada al c-LDL se relaciona proporcionalmente con el crecimiento de la placa arterial y su progresión provoca riesgo posterior de eventos cardiovasculares como infarto o ictus.
Recomendaciones para quienes ya han tenido incidentes cardiovasculares
El equipo del servicio de Cardiología manda un mensaje para esta población, y es que la recuperación después de un evento de estas características no termina al recibir el alta hospitalario, por lo que recomiendan sustentar sus cuidados en tres pilares:
– Tomar la medicación prescrita de manera estricta, incluyendo estatinas potentes y, si es necesario, otros fármacos para alcanzar el objetivo de menos de 55 mg/dL de LDL.
– Controlar los factores de riesgo, como mantener la presión arterial y la glucemia dentro de su rango, dejar de fumar y acudir a revisiones periódicas.
– Por último, realizar actividad física adaptada, seguir una dieta equilibrada (rica en frutas, verduras, pescado, aceite de oliva, baja en grasas saturadas y azúcares), controlar el peso y reducir el consumo de alcohol.