Santa Cruz de Tenerife, (EFE).- La patronal de la hostelería de la provincia de Santa Cruz de Tenerife y los sindicatos han retomado este lunes los contactos tras la huelga del sector en la pasada Semana Santa y se han emplazado a comenzar a negociar un nuevo convenio a partir de la próxima semana.
Un acuerdo, el de seguir negociando en el marco de la mesa del convenio, que la parte sindical interpreta con diferencias: UGT considera que hoy «salimos peor de cómo entramos» a la reunión y Sindicalistas de Base, central mayoritaria en el sector, que el acuerdo está más cerca.
Y mientras, desde la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Santa Cruz de Tenerife (Ashotel), su gerente, Pablo González, ha celebrado que los sindicatos se hayan avenido a abrir la mesa de negociación del convenio «para hablar y negociar todo», que es «lo que decíamos antes de la huelga».
Manuel Fitas, de Sindicalistas de Base, ha avanzado que en esa primera reunión, convocada para el 26 de mayo a las 11.00 horas, plantearán como acuerdo previo para continuar las negociaciones un incremento salarial del 6,5% con carácter retroactivo al pasado enero.
Y también, la adaptación del artículo 36 del convenio en vigor a la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Canarias que desestima los recursos de CCOO y UGT sobre la antigüedad.
Francisco González, vicesecretario general de UGT Canarias, ha criticado que la patronal se haya «empecinado en negociar el convenio» y ha defendido darle prioridad a la subida salarial, pues «los trabajadores están hartos de esperar» por una mejor redistribución de los beneficios del sector.
Solo a partir de ahí, sostiene UGT, se empezaría a negociar el resto de cláusulas.
Desde la patronal se aplaude la apertura de un marco en el que «se pueda hablar y negociar todo (…) Al final no hay nada nuevo que no hayamos hecho en los últimos 30 años», ha recalcado el gerente de Ashotel.
«Una vez tienes un convenio firmado, lo puedes modificar siempre y cuando se abra la mesa negociadora. No se puede ir a la cafetería y cambiar las condiciones entre tú y yo porque nos caemos bien. Eso no funciona así», ha ilustrado, y ha reiterado el discurso de «mano tendida» de la patronal «para negociar todo y más».
La hostelería y los alojamientos turísticos de la provincia de Santa Cruz de Tenerife vivieron los pasados Jueves y Viernes Santo una huelga tras el fracaso de un intento de acuerdo de última hora que no se pudo cerrar pese a la mediación del presidente de Canarias, Fernando Clavijo.
Las empresas del sector hotelero y de la hostelería, representadas por Ashotel y AERO, remitieron una última oferta a los sindicatos, pero las asambleas de delegados y trabajadores la rechazaron y decidieron mantener la convocatoria de huelga.
Esa última propuesta ofrecía una subida salarial del 6 %, camas elevables y la garantía de mantener el poder adquisitivo en convenio.
Antes de que comenzara la reunión de hoy, la primera tras la huelga de Semana Santa, Manuel Fitas (Sindicalistas de Base) deslizó que si no hubo acuerdo entonces fue porque se planteó muy a última hora.
Aquello supuso «un fracaso» de todos, porque «las huelgas se convocan para llegar a acuerdos», aunque ha celebrado que las acciones de protesta tuvieran «un seguimiento masivo, con una participación en la calle importante, como nunca vista», y además fueron «de guante blanco, sin incidentes».
Pablo González (Ashotel) ha lamentado que a diferencia de la provincia de Las Palmas, en la de Santa Cruz de Tenerife «no fuimos capaces» de evitar la huelga «a pesar de tener un preacuerdo» que en las asambleas de los sindicatos fue rechazado «por poquitos votos», pero «esa parte está superada y lo que tenemos es ponernos a trabajar para conseguir un nuevo acuerdo».
Francisco González (UGT) ha indicado que el que se alcanzó en la provincia oriental «no es malo, aunque no es el mejor», y el de la provincia de Santa Cruz de Tenerife «tendría que acercarse mucho o sobrepasarlo». EFE