La Biblioteca Municipal de Puerto del Rosario se llenó de poesía y emoción el pasado lunes, 12 de mayo, durante la presentación del nuevo libro del poeta majorero Andrés González Francés, Veinte poemas en llamas, una obra que, según sus palabras, nace del sentimiento más humano: la poesía.
El acto, organizado por el Ayuntamiento de Puerto del Rosario a través de la Concejalía de Cultura, sirvió también como homenaje a la trayectoria vital y literaria de uno de los nombres más representativos de la lírica insular. Durante la velada, el alcalde David de Vera destacó el valor simbólico del evento: “Es un honor para Puerto del Rosario acoger la presentación de esta obra que refleja la lucidez y el compromiso de un autor que ha sabido transformar la palabra en patrimonio vivo de nuestra isla”.
Por su parte, el concejal de Cultura, Juan Manuel Verdugo, subrayó la importancia de reconocer públicamente la trayectoria de González Francés: “Su obra no solo enriquece la cultura insular, sino que deja una huella profunda en el alma colectiva de Fuerteventura”.
Veinte poemas en llamas recoge veinte composiciones que, según el prologuista Juan Jiménez, “encierran un mensaje bien conceptuado en veinte fogonazos que recogen parte de su experiencia, parte de sus sentimientos”. En estos versos, el autor alcanza una madurez creativa plena, explorando desde lo íntimo hasta lo colectivo, desde la melancolía hasta la esperanza.
Durante el acto, González Francés compartió con el público algunos fragmentos de su obra. En el poema Un batir de alas libres define la poesía como “la desolación y la esperanza, aroma de palabras, sultana de las letras. ¡Sabedlo todos, ella es una flor que va brotando en verso!”.
El autor recibió de manos del alcalde y del concejal de Cultura una placa de reconocimiento y agradecimiento por su contribución a la literatura y a la cultura de Puerto del Rosario y de toda la isla.
La presentación de Veinte poemas en llamas no fue solo un evento literario, sino un emotivo tributo a una vida dedicada a las letras, al pensamiento y al servicio público. La poesía, como ha demostrado Andrés González Francés, sigue viva en el corazón de Fuerteventura.