Este proyecto unificará la estética de las calles transversales a El Calvario, renovará las redes de abastecimiento y reformará las aceras y plazas de aparcamiento. La calle José Antonio Bacallado, en La Esperanza, quedará cerrada desde hoy, permitiendo el acceso solo a residentes, para llevar a cabo las obras de reurbanización, adjudicadas a Canaragua Concesiones por 265.171,71 euros. Se prevé que los trabajos duren aproximadamente dos meses y medio, tiempo en el cual el acceso hacia la carretera general de La Esperanza (TF-24) se efectuará desde la calle La Sardinera, conectando con la calle Maximino Bacallado Rodríguez.
Esta es la segunda fase del proyecto de peatonalización y adecuación de vías para una correcta circulación y accesibilidad, del que se han beneficiado todas las calles transversales a El Calvario, con una inversión total cercana a 700.000 euros. El proyecto cuenta con una cofinanciación del 60% por parte de la Consejería de Obras Públicas, Vivienda y Movilidad del Gobierno de Canarias y un 40% por el Ayuntamiento de El Rosario.
El alcalde de El Rosario, Escolástico Gil, destaca: «Con esta obra completamos la reurbanización del entramado de calles que forman la entrada al casco urbano de la villa de La Esperanza. Comenzamos con la reforma integral de la calle El Calvario, logrando una mejora significativa en la calidad de las redes de agua, saneamiento, alumbrado y telecomunicaciones, además de embellecer el entorno».
La reforma de la calle José Antonio Bacallado, una vía de aproximadamente 130 metros que conecta la carretera de La Esperanza con la plaza del Ayuntamiento, interviene en una de las principales salidas hacia las carreteras generales (TF-24 y TF-272). Durante las obras, el tráfico deberá desviarse por la calle La Sardinera para salir a la TF-24 por la calle Maximino Bacallado Rodríguez.
Esta actuación no solo unificará la estética de las calles transversales a El Calvario, sino que también renovará las redes de abastecimiento, incrementará el tamaño de las aceras para mejorar la accesibilidad y reorganizará el tráfico y estacionamiento, proporcionando así un aspecto totalmente renovado al casco urbano de La Esperanza.
El proyecto también mejorará la circulación peatonal, aumentando el ancho de las aceras para que al menos una de ellas tenga una anchura mínima de 1,80 metros. Se homogeneizarán los pavimentos y se demolerán completamente las aceras actuales. La red de abastecimiento será renovada y la nueva red terciaria se conectará a las existentes en los extremos de cada calle, utilizando tuberías de polietileno bajo las aceras, a las que se conectarán las acometidas domiciliarias con llaves de corte en arquetas de registro.
Es importante recordar que la primera fase fue adjudicada por 395.900 euros a Canaragua Concesiones y abarcó la intervención en cuatro calles: Enrique Álvarez Bacallado, Agrícola Quintana, Catedrático Antonio González y Los Lirios.
La separación de la calzada de las aceras y estacionamientos se logrará mediante un bordillo de hormigón acostado. Las aceras contarán con un pavimento de baldosa de pórfido natural, mientras que las zonas de aparcamiento se pavimentarán con baldosa de hormigón. Además, la separación entre la banda de aparcamiento y la acera se realizará con una franja de adoquines de pórfido mixto rojo.