Las sesiones fortalecen el diálogo entre la ciudadanía y la administración local.
En esta ocasión, se ha compartido información en las cinco asambleas sobre el futuro proceso participativo del Plan General de Ordenación en el ámbito de Nueva Ciudad Alta. El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha celebrado una nueva convocatoria de las Juntas Municipales de Distrito, consolidando estos encuentros como espacios clave para el diálogo entre la administración local y la ciudadanía.
Estas sesiones, que se desarrollan cada dos meses en los cinco distritos de la ciudad, ofrecen un canal directo para que los vecinos y vecinas puedan trasladar sus propuestas, expresar sus preocupaciones y contribuir al diseño colectivo de la ciudad.
Cada Junta estuvo presidida por el concejal o concejala responsable del distrito correspondiente: Betsaida González en Ciudad Alta, José Eduardo Ramírez en el Distrito Centro, Nina Santana en Vegueta, Cono Sur y Tafira, Héctor Alemán en Isleta-Puerto-Guanarteme, y Esther Martín en Tamaraceite-San Lorenzo-Tenoya.
Estos órganos están integrados por la presidencia del distrito, su vicepresidencia y los vocales que actúan como representantes de la ciudadanía. Su labor se centra en analizar iniciativas y demandas vecinales, emitir informes informativos y facilitar el seguimiento de las acciones municipales en cada zona.
Las Juntas Municipales de Distrito no solo acercan la gestión pública a los barrios, sino que también refuerzan el compromiso del Ayuntamiento con una gobernanza basada en la escucha activa, la corresponsabilidad y la participación democrática.
Asimismo, las cinco juntas han abordado la situación del Plan General de Ordenación en el ámbito de Nueva Ciudad Alta, actualmente en fase preliminar y con un informe centrado exclusivamente en aspectos medioambientales. El Gobierno municipal continuará su desarrollo mediante un amplio proceso participativo que implicará a los vecinos y vecinas de los barrios incluidos en el área de actuación.
La primera fase del proceso ya permitió la implicación ciudadana mediante la presentación de alegaciones durante el periodo de información pública del informe de evaluación ambiental, que se extendió durante 45 días. Ahora, tras la emisión de dicho informe, comenzará la redacción participativa del plan urbanístico propiamente dicho.