La directora general del Paciente y Cronicidad del SCS destacó en su intervención la importancia de avanzar hacia un modelo de atención proactiva, integrador y equitativo, apoyado en herramientas digitales útiles y humanizadoras
Adelantó que su departamento trabaja en la creación de un banco de buenas prácticas que permita compartir, comparar y replicar lo que funciona en distintos contextos insulares
La directora general del Paciente y Cronicidad del Servicio Canario de la Salud (SCS), Rita Tristancho, participó este martes en el foro Innovación Digital y Cronicidad, celebrado en el Auditorio Máster de IESE Business School, en Madrid, en el que destacó que “la sostenibilidad sanitaria no se logrará solo con más tecnología, sino con tecnología útil, equitativa y profundamente humana”.
El encuentro, organizado por el Centro de Investigación para la Innovación en la Gestión Sanitaria (IESE-CRHIM), en colaboración con la compañía Abbott, reunió a responsables institucionales, representantes de sociedades científicas y asociaciones de pacientes con el objetivo de compartir enfoques sobre cómo los distintos servicios de salud están abordando la transformación digital para mejorar la atención a las personas con enfermedades crónicas.
Tristancho participó en la mesa redonda Sostenibilidad sanitaria: el papel del acceso tecnológico en la gestión de la cronicidad, junto a Rubén Castejón, subdirector de Asistencia Sanitaria Integrada del Servicio Navarro de Salud (Osasunbidea), y María Asunción Martínez, directora del Plan Integral de Diabetes de Andalucía. La sesión contó con la moderación de Jordi Ibáñez, senior associate en IESE-CRHIM.
Durante su intervención, la directora general explicó las principales líneas de trabajo que se están desarrollando en Canarias para avanzar hacia un modelo de atención sanitaria más personalizado, proactivo y sostenible. “El Servicio Canario de la Salud está evolucionando de un modelo reactivo a un modelo anticipativo, que integra ejes clave como la estratificación, las alertas clínicas o la monitorización remota”, puntualizó.
Entre las iniciativas destacadas, subrayó el uso de los Grupos de Morbilidad Ajustada (GMA) para la estratificación poblacional, combinando automatización con validación clínica por parte de los profesionales, así como el desarrollo del Visor de Historia Clínica Unificada accesible desde todos los niveles asistenciales. “Avanzamos hacia una historia clínica unificada e interoperable, que también integre datos sociales relevantes, que es la base de un modelo centrado en la persona”, apuntó.
Tristancho se refirió también al Plan 5C del SCS, dirigido a pacientes crónicos de alta complejidad, que promueve la atención domiciliaria, la telemonitorización y la coordinación sociosanitaria. En este contexto, destacó el programa AP_Cuida2, que permite el contacto automatizado del paciente con su enfermera en atención primaria a las 48 horas del alta hospitalaria, reforzando así la continuidad asistencial.
En relación con la equidad territorial, señaló que “la diversidad es una fortaleza, pero también un reto”, especialmente en una comunidad conformada por ocho islas con realidades sanitarias muy diferentes. Por ello, defendió la necesidad de equilibrar la flexibilidad territorial con unos estándares comunes de interoperabilidad, calidad y seguridad, alineados con la Estrategia de Salud Digital del Servicio Nacional de Salud (SNS), e incorporar medidas específicas de inclusión digital para garantizar el acceso en contextos rurales o de difícil conectividad.
“En Canarias tenemos más de dos millones de tarjetas sanitarias, 14 millones de turistas anuales, realidades demográficas muy diferentes y múltiples innovaciones dispersas en el territorio. Este ecosistema nos obliga a innovar, pero también a organizarnos para aprender juntos, haciendo un uso racional de los recursos”, explicó.
Asimismo, abogó por el uso estratégico de los datos clínicos y la generación de evidencia en vida real (Real World Evidence) para orientar tanto la toma de decisiones clínicas como la planificación de recursos, especialmente en zonas con alta vulnerabilidad o presencia migrante. “Los datos deben estructurarse desde su origen, conectarse con objetivos clínicos y utilizarse en tiempo real para anticipar necesidades”, afirmó.
Por último, insistió en la necesidad de consolidar una cultura de evaluación y escalado de buenas prácticas. “Innovar no es solo hacer cosas nuevas, es mantener y compartir lo que ya funciona. Desde Canarias queremos impulsar un banco autonómico de buenas prácticas que nos permita aprender juntos, también entre islas”, concluyó.
El foro concluyó con una mesa redonda integrada por consejeros de Sanidad de diversas comunidades autónomas, en la que se abordó la construcción de un sistema sanitario más sostenible en torno a la cronicidad y la transformación digital. En concreto, participaron Fátima Matute, de la Comunidad de Madrid; José Luis Bancalero, por Aragón; María Martín, consejera de Salud y Políticas Sociales del Gobierno de La Rioja, y César Pascual, consejero de Salud del Gobierno de Cantabria.
La jornada incluyó también la presentación del estudio elaborado por IESE titulado Innovación digital y cronicidad: presente y futuro de la diabetes tipo 2, así como la ponencia de clausura a cargo de Juan Fernando Muñoz Montalvo, secretario general de Salud Digital, Información e Innovación del Sistema Nacional de Salud.