El 2 de mayo se conmemora el Día Internacional contra el Acoso Escolar, una jornada para reflexionar sobre una realidad dolorosa que afecta a miles de menores. En este contexto, la consejera insular por Nueva Canarias–Bloque Canarista en el Cabildo de Fuerteventura, Sonia Álamo, ha difundido un artículo titulado “Infancias rotas, instituciones ciegas: basta de lamentos y mirar hacia otro lado”, donde lanza una dura crítica a la inacción ante el bullying.
Álamo denuncia que el acoso escolar ha sido normalizado con una “frialdad que asusta”, y recuerda que en Canarias ha habido menores que han intentado quitarse la vida, e incluso lo han conseguido, como consecuencia directa del acoso. “No por una enfermedad mental. No por una predisposición genética. No por fragilidad. Por acoso. Por bullying. Por violencia en los pasillos del instituto, en los grupos de WhatsApp, en la grada del campo de fútbol”, afirma en su texto.
Más allá de la denuncia, la consejera exige acción: protocolos eficaces en todos los centros educativos, planes integrales de prevención y detección temprana, atención psicológica accesible tanto para víctimas como para agresores, y una legislación autonómica que reconozca el bullying como una forma de violencia estructural.
Para Álamo, las instituciones, el profesorado, las familias y la propia sociedad han fallado. “Lo hemos llamado conflicto, lo hemos tratado como problema de convivencia, lo hemos gestionado con fórmulas administrativas, y hemos llegado tarde”, lamenta.
“No podemos permitirnos más minutos de silencio. Ni más funerales. Ni más notas de duelo sin acción. Porque cada caso es una vida entera. Y porque mañana puede ser la hija de cualquiera. La sobrina. La amiga”, advierte.
Desde Fuerteventura, Sonia Álamo alza la voz por quienes no han sido escuchados y exige que se deje de mirar hacia otro lado. “Actuemos. Ya”.