Un equipo multidisciplinar atiende a más de 250 personas al año con patologías como la cardiopatía isquémica y la insuficiencia cardiaca. La edad media de estos pacientes es de 59 años, siendo el 79,3 por ciento hombres y el 20,7 por ciento mujeres
El 59 por ciento de quienes completan el programa de rehabilitación abandona el hábito tábáquico
La unidad de Rehabilitación Cardíaca del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria, centro adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, ha sido la primera de Canarias en obtener el certificado de excelencia otorgado por la Sociedad Española de Cardiología (SEC), que avala la calidad asistencial y el compromiso con la mejora continua en la atención a pacientes con enfermedades cardiovasculares.
Esta acreditación se ha conseguido en el plazo mínimo establecido de dos años desde la puesta en marcha de la unidad, lo que evidencia el alto nivel de cumplimiento de los estándares exigidos por la SEC en cuanto a procedimientos clínicos, seguridad del paciente y resultados en salud.
Desde su puesta en funcionamiento en abril de 2022, la unidad ha tratado anualmente a alrededor de 250 pacientes con enfermedades cardíacas, principalmente cardiopatía isquémica e insuficiencia cardíaca. Estas patologías afectan aproximadamente al dos por ciento de la población general en España, una cifra que se eleva hasta el dieciséis por ciento en personas mayores de 70 años.
Del total de personas tratadas, el 81,3 por ciento son hombres y el 20,7 por ciento mujeres, siendo la edad media de estos pacientes los 59 años. Se ha logrado una tasa de abandono del consumo del tabaco de un 59 por ciento en las personas que finalizan este programa de rehabilitación cardíaca.
La unidad de Rehabilitación Cardíaca del complejo hospitalario está integrada por un equipo multidisciplinar compuesto por más de quince profesionales de los servicios de Cardiología, Medicina Física y Rehabilitación, Neumología, Urología, Endocrinología y Trabajo Social.
El enfoque de intervención de esta unidad combina el entrenamiento físico supervisado de los pacientes y, además, aborda de forma integral los principales factores de riesgo cardiovascular: reducción del colesterol LDL, control óptimo de la tensión arterial, ajuste de la hemoglobina glicosilada en diabetes mellitus, abandono del tabaco y apoyo para la pérdida de peso.